Humor es… Aristóteles!
En esta ocasión, un comediante misógino: No me odien, no fui yo… fue Aristóteles.
En esta ocasión, un comediante misógino: No me odien, no fui yo… fue Aristóteles.
Tip #12: Estarte pedorreando en la noche frente al monitor y, por la güeva, preferir dormir antes que ir a tirar el topo, es… Finíiiissssimo!. **Éste aplíquenlo bajo su propia responsabilidad, no me culpen si amanecen cagados.
Éstas vacaciones (que no sé si terminen pronto), me he tomado la molestia de ver los programas matutinos para “señoras bonitas” con meros fines de investigación y, la verdad, también porque soy una especie de parásito con dotes de analista. En fin, ahí les va… La pareja se disponía a degustar sus sagrados alimentos. -Vieja, […]
JESÚS TE AMA… Deja de decir que nadie te quiere. No me debes nada.
ADVERTENCIA: Éste es un post largo y con fines terapéuticos, tal vez no diga nada, tal vez sí. –blah blah blah blah blah blah blah. –blah blah blah blah blah blah blah. –blah blah blah blah blah blah blah. –blah blah blah blah blah blah blah. -Es que no me entiendes- dijo ella. -¿Qué tengo […]
Al principio tenía dudas: *¿si dijera “blú” (con acento) los ojos serían azul más fuerte? waka waka waka* Pero después reconocí y acepté mi ignorancia cuando google NO me corrigió: Soy fans de los contactos aficionados futboleros, me recuerdan mis tiempos de intento de hincha puma.
Pues eso, conseguí colarme. Denle click para leerme en el Recolectivo de esta semana: “Mea maximus culpa (El rey del cunnilingus)” Cambio y fuera.
Continúa después de salto… ACTUALIZACIÓN: Pido una enorme y sincera disculpa por no saber reconocer a los apóstoles, y por mis pocos conocimientos bíblicos. Condénenme, merezco el infierno. Aún así, espero que el orden de los factores no altere el producto. ¿Me aman?
Tip #11: Decir “quiero cola”, en lugar de “echemos un palito”, es… Finíiiissssimo!. Tip cuasi-fusilado inspirado: GRACIAS.
Estoy rodeado de filósofos y gente preocupada por encontrar respuesta a las preguntas que todos alguna vez nos hemos hecho, a veces me responden sin darse cuenta. Muchas veces me pregunté qué tenía de interesante el personaje de Thalía en “Marimar”. He aquí la revelación: En fin, no me deben nada.